By: Dianne Rojas – Paralegal – Bolour/Carl Immigration Group
A former program instituted by the Trump administration after the name “Migrant Protection Protocols (MPP) otherwise known as “Remain in Mexico” is returning after Biden’s decision to place a halt when arriving in office. A ruling result of a lawsuit by Texas and Missouri, a federal judge ordered Biden to reinstate the program ruling the halt to the program “unjustified”.
Many say that the reinstating of the program will provoke a “migratory crisis” in where many migrants will suffer the consequences. Among those migrants’ individuals from central American countries, and others such as from Haiti confront the harsh conditions of waiting for a response to an asylum case. They are faced with the continuing fear of their home persecution such as political and social unrest and natural disasters, and also the simple realities of poverty. Meanwhile thousands are scrutinized with these harsh realities’ other clauses such as, Title 42 contribute to the pressures of immediate expelling, vast amounts of migrants seeking asylum to be returned to their home country with lack of other options.
Many central Americans share their testimonies of returning to Mexico only to find themselves facing kidnapping, sexual abuse, and other forms of violence. These communities not familiar with the Mexican region are desperate in awaiting their response and having to fear the lack of response from their asylum-seeking status. This leads to having a definitive two option decision of “remaining in detention in Mexico or returning home to the country they fled”. The asylum seekers mostly from El Salvador, Guatemala and Honduras and others are composed of different age groups, sexual orientations, and genders who individually face their own persecution outside of the U.S, and in Mexico. Waiting for a legal status response in long periods of retention force individuals to seek their own shelter under the country of Mexico. This retention provokes migrants to find unstable places of living, deal with incredible violence and affect the country of Mexico which is forcefully sheltering these migrants. On the other hand, having your asylum decision denied further contributes to the migrants choosing other dangerous routes of entry forcing themselves to receive their protection illegally.
The reinstating of the MPP program and the uses of health clauses like Title 42 to prevent asylum seekers from entering, continue to exacerbate the conditions of thousands of individuals who seek protection from the U.S. Leaving them with a harsh decision to deal with whichever outcome is assigned to them. Moving forward with the MPP in place we can anticipate that asylum seekers will continue to deal with confronting these harsh conditions as they continue to wait. The halt that Biden placed over the MPP may have been a temporary relief for those seeking to enter during that period. But with those currently seeking entrance the options are limited to two options. One that allows them to have entry and the other to be retained until further notice of being sent back to a country they initially fled for persecution and lack of protective shelter.
LAS DURAS REALIDADES DE SER UN SOLICITANTE DE ASILO EN 2021 BAJO EL PROGRAMA MPP (PERMANECER EN MÉXICO)
By: Dianne Rojas – Paralegal – Bolour/Carl Immigration Group
Un antiguo programa instaurado por la administración Trump después del nombre “Protocolos de protección al migrante (MPP), también conocido como” Permanecer en México “, regresa después de la decisión de Biden de detener su llegada al poder. Un fallo resultado de una demanda de Texas y Missouri, un juez federal ordenó a Biden que restableciera el programa dictaminando que la suspensión del programa era “injustificada”.
Muchos dicen que la reinstalación del programa provocará una “crisis migratoria” en la que muchos migrantes sufrirán las consecuencias. Junto a esos migrantes, individuos de países centroamericanos y otros como Haití enfrentan las duras condiciones de esperar una respuesta a un caso de asilo. Se enfrentan al temor continuo de la persecución de sus hogares, como los disturbios políticos y sociales y los desastres naturales, y también las simples realidades de la pobreza. Mientras tanto, miles son examinados con estas duras realidades. Otras cláusulas, como el Título 42, contribuyen a las presiones de la expulsión inmediata, grandes cantidades de migrantes que buscan asilo para ser devueltos a su país de origen sin otras opciones.
Muchos centroamericanos comparten sus testimonios de regresar a México solo para encontrarse enfrentando secuestros, abusos sexuales y otras formas de violencia. Estas comunidades que no están familiarizadas con la región mexicana están desesperadas esperando su respuesta y tienen que temer la falta de respuesta de su condición de solicitantes de asilo. Esto lleva a tener una decisión definitiva de dos opciones: “permanecer detenido en México o regresar al país del que huyeron”. Los solicitantes de asilo en su mayoría de El Salvador, Guatemala y Honduras y otros están compuestos por diferentes grupos de edad, orientaciones sexuales y géneros que individualmente enfrentan su propia persecución fuera de los Estados Unidos y en México. Esperar una respuesta de estatus legal en largos períodos de retención obliga a las personas a buscar su propio refugio en el país de México. Esta retención provoca que los migrantes encuentren lugares de vida inestables, lidien con una violencia increíble y afecten al país de México que está acogiendo con fuerza a estos migrantes. Por otro lado, la denegación de su decisión de asilo contribuye aún más a que los migrantes elijan otras rutas de entrada peligrosas y se vean obligados a recibir su protección ilegalmente.
El restablecimiento del programa MPP y el uso de cláusulas de salud como el Título 42 para evitar que los solicitantes de asilo ingresen continúan exacerbando las condiciones de miles de personas que buscan protección en los EE. UU. Dejándolos con una dura decisión de lidiar con cualquier resultado que se les asigne. Al avanzar con el MPP en vigor, podemos anticipar que los solicitantes de asilo continuarán lidiando con estas duras condiciones mientras continúan esperando. El alto que Biden colocó sobre el MPP, pudo haber sido un alivio temporal para aquellos que buscaban ingresar durante ese período. Pero con aquellos que actualmente buscan ingresar, las opciones se limitan a dos opciones. Uno que les permite tener entrada y el otro ser retenido hasta nuevo aviso de ser enviados de regreso a un país del que inicialmente huyeron por persecución y falta de refugio protector.